Medidas contra el turismo de masas en Barcelona
El Ayuntamiento de Barcelona ha implementado nuevas medidas para regular la actividad de los autocares turísticos en el centro de la ciudad. Una de las acciones más destacadas del proyecto Zona Bus 4.0 es el aumento del impuesto por aparcamiento, que pasará de 20 a 80 euros.
En 2023, se registraron más de 156.000 paradas en las 222 plazas habilitadas, que incluyen 69.000 paradas de embarque y desembarque y 87.000 de estacionamiento. Este tráfico generó alrededor de un millón de euros para el municipio, una cifra que podría ascender a más de 4 millones de euros con la nueva regulación.
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El proyecto se presentará a otros grupos políticos y a las empresas del sector, e incluirá la reducción de plazas de estacionamiento en el centro, la creación de apeaderos en las entradas de la ciudad y el uso de tecnología para gestionar los flujos de visitantes.
El teniente de alcalde de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo, Jordi Valls, destacó: “Un turista que se queda a dormir en Barcelona paga unos 7 euros, mientras que un visitante diario solo 0,5 céntimos, a pesar de usar intensivamente el espacio público.” Además, enfatizó que la gestión del turismo busca fomentar o desincentivar ciertos tipos de turismo masivos mediante la regulación y fiscalidad.
Esta medida se suma a otras recientes del Ayuntamiento, que ha aumentado la tasa sobre pernoctaciones turísticas y planea eliminar todas las viviendas dedicadas al alquiler vacacional, además de limitar la llegada de cruceros.